LA “MAGIA” DE LOS TRES REYES

¿Quién no ha vivido en su niñez, la intriga, el suspenso generados por no saber qué nos traerían de regalo los Tres Reyes (mal llamados “magos”), y luego la emoción de encontrar junto a nuestros zapatos algunas, todas, o más cosas que las que pedimos en nuestra cartita?

Ah! qué épocas! Ahora la “cartita” puede ser que se escriba en una PC, o en un Blackberry, pero vale igual.

Y los niños pueden estar esperando algunas cosas electrónicas, que en tiempos idos nos hubieran parecido realmente mágicas.

Pero la magia mayor de los Reyes, es esa excitación, ese entusiasmo que generan, y no sólo en los más pequeños, sino también en los adultos, que por cierto, esperan y aguardan con curiosidad casi indisimulada, ¿qué regalo les habrán traído los Reyes?…

En el misterio, en el no saber hasta el momento oportuno, en el despertarse temprano el 6 de enero para encontrarse con los regalos, todo se desarrolla en tremendo suspenso, en pasos dados a hurtadillas, en evitar hacer ruidos innecesarios, en cómo jugar casi a las escondidas, para que nadie se dé cuenta de cómo los regalos llegan hasta los zapatos que se han dejado…

Los reyes históricos, no eran magos, sino astrólogos, hombres sabios de su época, que siguiendo una “estrella” que fue desplazándose en el cielo hasta que se detuvo sobre determinado lugar, y lanzó un rayo luminoso hacia abajo, para señalar el punto preciso en que se había producido el nacimiento de Jesús, dieron con María, José y el niño,y entregaron sus presentes de oro, incienso y mirra, según cuenta la tradición.

La mala traducción de la palabra griega “magii”, hizo que se les llamara “magos”, pero no tienen ninguna similitud con los ilusionistas y prestidigitadores que en la actualidad nos brindan hermosos espectáculos donde lo “imposible” se hace realidad.

Y sí, la “magia” de los Tres Reyes, sigue renovándose año a año a lo largo y ancho de la América Latina, y en los hogares latinos en Estados Unidos y otras partes del mundo, donde se mantiene la hermosa tradición.

Habrá pues que acostarse temprano este miércoles 5, porque mañana 6, ¡habrá sorpresas!!




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