Creo que tengo poca paciencia, aunque también sé que me he superado enormemente si me comparo con décadas anteriores.
Pero me cansa que una mujer se pase dos horas dando vueltas en una tienda para ver qué va a comprar, o qué ofertas hay, o qué cosas puede elegir como regalos, etc.
Me cansa el automovilista que pudiendo ir a 60 kilómetros por hora decide ir a 40, distante de todo el resto delante de él, haciéndome perder tiempo inútil, en un lugar de un solo carril en que no puedo pasarlo. O peor, el que va despacio y descubro que es porque ¡está prestando más atención a su conversación por el celular, que a conducir!
Pienso que conducir y hablar por teléfono son actividades incompatibles. Debería sancionarse a quien hable por teléfono mientras está conduciendo, porque pone en peligro la vida de los demás.
Me cansa la gente indolente, irresponsable, que no hace las cosas en el tiempo debido y en la forma correcta.
Me cansa la gente ignorante que es enfatuada, y que acepta y difunde teorías conspirativas, fantasías, especulaciones y mentiras, abrevando de fuentes irresponsables, pero rechaza en cambio la sobriedad, la honestidad, y la información científica. Y apelo a esas personas, y las corrijo una y otra vez, y les proveo información adecuada...pero prefieren anquilosarse en el error y seguir en su tesitura. Eso confieso, me cansa.
Me cansa la gente dada a lo esotérico, que acepta cualquier cuento que le hacen en tanto les agrada, en lugar de buscar la verdad, aunque de pronto no sea de su gusto. Y otra vez, trato de disuadirles, de hacerles ver los errores, de que se den cuenta que el enfoque que tienen sobre algunos temas no es el correcto, que por ese camino no van a conocer nada...pero otra vez, la altanería de los ígnaros, puede más que la humildad de quienes queremos ayudarles.
Me cansan los periodistas que no saben ser objetivos, o que ellos mismos son sesgados o toleran que se les imponga sesgo en la noticia que presentan. Y los que hacen entrevistas equivocadas; como que alguien que es judío sea llamado a evaluar objetivamente la situación en Gaza, o que a una persona de color se le pregunte cuánta calidad o cuán valiosa es la actual representante de Estados Unidos ante la ONU, que coincidentemente también es afro-estadounidense.
Y me cansan las personas que se erigen en jueces, adoptan posiciones inflexibles, y someten a los demás a actitudes duras, drásticas, sin medir las consecuencias, con total falta de respeto y consideración. Personas que por querer tener razón, son capaces de volverse insensibles, incapaces de practicar siquiera la compasión, que ya no el amor.
También en estos casos, les rodeo de afecto, les expreso el alto concepto que tengo de ellas, apelo a sus sentimientos, a su capacidad de reflexión, a que no hagan un mar de una gota de agua...pero es difícil de momento persuadirles de que ---a menos que lo quieran echar todo a perder-- no es ese el camino más adecuado para tratarse entre personas de bien, y menos entre quienes consideran que hay una amistad...
Esas cosas sinceramente me cansan. Y francamente, no debieran suceder de esa manera.
enigma
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