POR EL BUEN CAMINO

A veces le llamamos "andar con el pie derecho", que es lo mismo que decir andar en la buena senda, por el buen camino.

Y uno tiene buena cuota de responsabilidad en ello.

Es interesante que bíblicamente, una de las formas de concebir el pecado, es la de "andar fuera del camino" o "salirse del camino".

Es como un tren cuando descarrila. Realmente para que el tren ande bien, tiene que estar bien apoyado sobre las vías.

Para uno, individualmente, significa andar bien apoyado en los valores que ha incorporado desde pequeño, inculcados con las palabras y el ejemplo de los padres.
Esos mismos valores que uno ha querido o podido transmitir a los hijos, y con los que procura vivir cada día.

Y cuando se anda por el buen camino, empiezan a surgir ideas, iniciativas, oportunidades y actividades que son reconfortantes en más de un sentido.

En eso estoy.  

A vía de ejemplo, me hace muy feliz la idea de que voy a pasar las tradicionales fiestas de Navidad, Año Nuevo y Reyes con mi famlia en Iowa.

Por cierto que si la soledad es una carga a veces muy pesada en un día cualquiera, se multiplica con creces durante esas fechas. De modo que las pasaré acompañado. 

También estoy planeando algún otro viaje, tal vez a Miami, donde tengo que reencontrarme con muy queridos amigos.

Por otra parte, en tres días de intenso trabajo, pude culminar la preparación de un par de conferencias.

Y muy posiblemente esta misma semana o la que viene, retorne a algo que en su momento me procuró una gran paz interior: la pintura. 

Mi primer cuadro de esta nueva serie --si así le puedo llamar-- será el rostro de una persona. 

Con anterioridad, hace años, pinté a la acuarela un cuadro de veleros, inspirado en un boceto a lápiz hecho por Vincent Van Gogh. Pinté en acrilico, un cuadro abstracto basado en la carátula de una revista, y un cuadro al pastel que era una reproducción de uno de Van Gogh, que presenta un jarrón con flores sobre una mesa.

Esta vez tengo algunas ideas muy especiales sobre cómo voy a pintar, veremos qué surge. Pero sin duda, sé de antemano que será una experiencia altamente gratificante.

Afortunadamente además, tengo una pléyade de sinceros, auténticos y buenos amigos, que me conocen de mucho tiempo y por eso mismo me quieren bien. Y en todas estas cosas, su palabra de aliento me acompaña.

enigma

Textos protegidos por derechos de autor