Siento a la música como una gran compañera.Ella es parte de nuestra existencia, de nuestro entorno, de nuestro sentir.
La música nos inspira, nos ayuda a meditar, nos transporta.
La instrumental, al no tener palabras, se torna aún más universal.
No importa las formas que asuma, no importa si es clásica o popular (descarto por supuesto las expresiones de lo que podría llamarse “música-basura”, como el “rap” en el hemisferio Norte, o la “cumbia villera” en el hemisferio Sur).
La música es capaz de decirnos, de entablar un diálogo con nuestro espíritu, y de expresarnos también, de transmitir de pronto nuestro mensaje a otros/as.
Por eso, estos días voy a dedicarlos a compartir con ustedes algunas músicas y algunos autores e intérpretes.
Ya comencé con la estupenda violinista Vanessa-Mae.
Hoy voy a convocar a un hombre, que en el ambiente artístico es conocido como Karunesh, que en idioma de la India significa “Dios de Compasión”.
Su verdadero nombre es Bruno Reuter, alemán, nacido en 1956. Su música tiene una profunda influencia asiática y en particular de India.
Habiendo vendido más de 450 mil álbumes, Karunesh es uno de los artistas de la música New Age más conocidos.
Desde 1002, Karunesh vive en Maui, en el Estado de Hawaii, EE.UU.
Hoy comparto con ustedes una música titulada “A Journey of the Heart” o sea “Un Viaje del Corazón”
enigma
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