Un día mi hijo conversando conmigo me dijo que el día que yo ya no esté en esta exisrtencia, podré ser recordado --entre otras cosas-- por algunas frases típicas mías, tales como "la mentira tiene patas cortas"
Y es muy cierto. Se miente para ocultar algo que nos avergüenza. Se miente para hacer daño a una tercera persona. Se miente para excusarse de una falla o una falta.
Las razones pueden ser múltiples, pero en el fondo, nada justifica una mentira. Y la mentira a la postre dura poco, la verdad de alguna manera, aún la más insólita o inesperada, surge, y un universo parece repentinamente venirse abajo.
Es que finalmente la mentira termina dañando a quien la profiere, pues le quita autenticidad, respetabilidad, y la confianza que otros pueden tenerle.
Deteriora la imagen propia, la disminuye, y hace que todo cuanto diga o haga se tome con pinzas.
Si algo restituye una imagen dañada por la mentira, si algo renueva fortalecida la confianza, si algo devuelve la autenticidad a una persona, es decir la verdad. La verdad absoluta, total, a rajatablas, aunque duela, aunque pueda tener consecuencias de pronto no queridas, aunque muestre un lado flaco de uno.
Pero también es cierto que cuando la verdad resplandece, entonces, esa corrección de camino o de conducta, ese dejar la mentira atrás y volverse hacia la verdad, enaltece a quien lo hace, y genera nuevamente confianza, restituye valores.
Hay circunstancias aciagas, desgraciadas, que a veces más que una mentira nos llevan a inventar una excusa. Pero a la postre eso no sirve.
Es cierto que a veces a un enfermo no se le transmite toda la verdad, o la gravedad de una situación. Es cierto que a una persona anciana, que ha querido mucho a alguien, no se le da la noticia de que ese alguien falleció, por ejemplo. ¿para qué desatar angustia y dolor en quien por su edad debe estar distendida, tranquila y pasar plácidamente los últimos años de su vida?
Esas suelen llamarse "mentiras piadosas". En el fondo, están nutridas de un sentido de simpatía por la persona a la cual se le dicen, simpatía que envuelve afecto, cariño o hasta admiración.
Pero realmente son las situaciones excepcionales. En las normales de todos los días, la mentira deteriora las relaciones humanas y por tanto debe ser dejada de lado.
enigma
No comments:
Post a Comment