AMISTAD

Siempre lo he dicho y lo seguiré sosteniendo: en tanto la familia nos viene dada, los amigos se hacen.

Los amigos surgen de los vínculos que somos capaces de iniciar, sostener, desarrollar y acrecentar.

Una de las más importantes bases en la relación de amistad, está dada por la confianza y el respeto mutuos.

Si no hay confianza, es diicil que pueda haber real amistad. Si no hay respeto, la amistad se pierde.

Cuando ambos factores se conjugan armoniosa y sostenidamente, la amistad es cual bella flor, que adorna la vida, que la perfuma, que crece y hermosea las relaciones humanas.Cuantos más amigos somos capaces de tener, de forjar, de mantener en un efectivo vínculo, más hermosa se torna nuestra vida, más provechosa nuestra existencia.

La amistad presupone de nuestra parte, lealtad, actitud de servicio, sacrificio si es necesario: a los amigos no se les puede fallar.

Luego, la amistad demanda reciprocidad. Cuanto recibimos es cuanto tenemos que estar dispuestos a dar y viceversa.

Pero el disfrute de la amistad es infinito y hermoso.

Ahora en mis vacaciones, estoy haciendo nuevas amistades, y renovando los vínculos con las que llevan ya muchos años. Y verdaderamente me emocionan las expresiones de cariño, de respeto, de aprecio. Y me conmueven los recibimientos, los agasajos, los recuerdos, y las instancias nuevas que surgen con amistades recientísimas.

A la postre, uno va llevando consigo un apabullante conjunto de magníficos encuentros humanos, que se echan de menos en la soledad, y se valoran totalmente, cuando se está acompañado.

La amistad, pienso, es el más preciado tesoro que podemos construir a lo largo de nuestra efímera existencia. Dichosos quienes tienen y están rodeados por una cantidad de amigos que les quieren bien, que les desean lo mejor, que les apoyan, que les solucionan problemas, y que están dispuestos a respaldarles en lo que fuere menester.

La vida con amigos, vale la pena vivirla!

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