LAS MUJERES NOS RESULTAN COMPLICADAS

Tal vez alguna de ellas me reproche que generalizo y que debería decir que "algunas mujeres" nos resultan complicadas.

Pero sinceramente, amigos varones, ¿conocen a alguna que no lo sea?

Confieso que me ha tocado pasar por experiencias exasperantes, donde francamente me doy de bruces procurando entender de alguna manera, una cierta lógica, una cierta coherencia en el pensar, sentir o actuar de algunas mujeres. Y he culminado sin poder  comprender sus actitudes, sus variaciones de ánimo, sus radicales posturas diferentes consigo mismas.

Quien dice: "ven", y luego "no vengas".  Quien dice "te llamo para encontrarnos", y luego no llama, y si uno llama dice "no puedo encontrarme contigo".

Quien dice "voy", y más adelante dice: "no te preocupes, no voy", y es justamente allí cuando comienza mi preocupación.

Son breves anécdotas, sin tiempo, nombre ni apellido, pero verídicas todas, que muestran en el fondo, esa cosa compleja, contradictoria, ese "modo irracional" con que operan algunas mujeres.

Y lo que es muchisimo peor, cuando se "hacen la película" de que uno hizo tal o cual cosa,  o presumen que uno tiene tales intenciones, o piensa de tal manera, y hasta discuten en base a eso, cuando es todo un producto de la imaginación de ellas, sin un punto de asidero en la realidad.

Cuando un hombre y una mujer logran --sobre la base de sinceridad  y confianza mutua-- entenderse, complementarse, sentirse mutuamente apoyados, captar la felicidad de andar juntos el camino de la vida, realmente son una excepción, y  pueden sentirse dichosos.

Lo demás es drama, desencuentro, corazones partidos al medio, lágrimas derramadas en silencio, angustia, insatisfaccion, vida truncada, no realizada a pleno.

Curiosamente, en los países muy machistas, o en estratos sociales bajos, la mujer adopta una posición sumisa, y tolera vivir su infelicidad por no animarse a dejar al hombre que tiene, y abrirse a la libertad de una vida mejor. Es otras palabras, acepta vivir sometida. 

Eso habla muy mal de esos hombres, pero...tampoco habla bien del temor irracional de ellas. No obstante, a veces ese temor es real, y es el miedo a un castigo físico, psicológico, o a perder la custodia de los hijos. La peor, esta última, de todas las situaciones. 

Pero para esa última situación, siempre insistiré en que están los abogados, y está el divorcio. 

Disculpen haber desgranado estas reflexiones, pero como digo más arriba, aún sigo sin entender muchas cosas de las mujeres, o al menos, de unas cuantas de ellas.

Pero espero de las damas no se me enojen. Y si quieren decir algo, las invito a usar el espacio para comentarios.

enigma
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