Saturday, July 21, 2018

NOSTALGIA POR LOS FALLECIDOS





No estoy refiriéndome a los seres queridos de la familia que dejaron esta existencia, sino a una pléyade de personas que conocimos en el barrio, en nuestros estudios, en los lugares donde hemos trabajado, o desarrollado nuestra actividad.

A conocidos, a hermanos en la fe, a amigos, a compañeros de una actividad en particular.

En muchos momentos me pongo a pensar en quienes conocí en mi primer empleo, cuando tenía 18 años, y me pregunto si aún algunos están todavía viviendo esta realidad como yo.

Evoco a compañeros de estudio a diversos niveles, desde la escuela al post-grado, y a mis queridos y entrañables amigos del CIOVI, que ya no están entre nosotros. 

Y cuando vienen a mi memoria, me entran unas ganas enormes de pensar que aún están, que aún puedo escribirles y me responderán, que los encontraré seguramente en Facebook o en Twitter, y que tendré la enorme dicha de disfrutar de encuentros personales y diálogos inefables.

Así siento.  Es esto que llamo nostalgia por los fallecidos. Por aquellos y aquellas que me resisto a pensar en la dura realidad de que les he perdido. Que ya no están de este lado de la existencia.

Y por otro lado, siento un enorme agradecimiento a la oportunidad de haberles podido conocer, de haber podido compartir días, meses, años de vida con ellos/as.

De haber conocido sus improntas personales, sus desvelos, sus preocupaciones, sus ideales, de qué cuadro de fútbol eran hinchas, o a qué partido político votaban.

Sobre todo de haber contado con su confianza y su amistad.

A veces siento como que he vivido mucho para superarles en su estadía tridimensional.

Pero está bien, el recuerdo de ellos es un desafío a dar lo mejor de mí en bien de muchos, a seguir siendo quien soy cada vez más. A dejar mi huella bien marcada, antes de que me llegue la hora de mi partida.

Sé que todavía tengo desafíos por delante y cosas por hacer. Y estoy feliz con ello.

No sé si ustedes, mis lectores, a veces tienen como yo instantes de esa nostalgia por los que ya no están entre nosotros. Arriesgaría a pensar que sí. 
 

Milton W. Hourcade
Textos protegidos por derechos de autor
  

No comments:

Post a Comment