DIA DE LAS MADRES QUE SON MADRES

Con cierto desfasaje en la fecha, --en algunos países el 9 de Mayo, en otros como aquí en Estados Unidos el Domingo 12-- se celebra el Día de la Madre.

Siempre es bueno hacer un paréntesis al diario trajín para conmemorar, celebrar o recordar a la madre. 

A ese ser inigualable que como ningún otro sobre la faz de la Tierra se ha dado en amor desde la concepción, y luego del parto ha dedicado su vida a cuidarnos, alimentarnos, vestirnos, educarnos, transmitirnos valores, enseñarnos lo bueno  en contraste con lo malo, y nos ha alentado en cada paso de nuestra existencia y de nuestra carrera como seres humanos.

En un mundo tan complejo y una civilización tan trastornada como la que actualmente vivimos, en que los anti-valores se transforman por arte de decisiones políticas (no éticas) en "derechos humanos", es bueno celebrar a las madres que quieren ser madres, no a las que quedan desaprensivamente e irresponsablemente embarazadas y luego apelan al aborto. Porque el derecho a optar, está antes y no luego del acto sexual acometido sin medir sus consecuencias.

Es bueno celebrar a las madres unidas en matrimonio, o al menos, unidas sólidamente a su pareja, porque asumen una responsabilidad completa y en condiciones, para llevar adelante la vida de la criatura que han tenido.

También es bueno celebrar a las madres que viven en pareja con un hombe, y no a aquellas aberrantes situaciones en que dos mujeres son pareja y pretenden ambas ser madres de una criatura fecundada "in vitro".  O peor aún de dos hombres viviendo en pareja que pretenden ser padres.  ¿y los derchos de la criatura a tener los valores que corresponden a la normalidad, o sea a tener padre y madre, no cuentan?

No se es madre biológiocamente. Se es madre por lo que sigue luego que la criatura ha nacido. Y en ese sentido merecen igual homenaje aquellas madres adoptivas, que han dado todo su amor, su cariño, su dedicación y consagración a ver crecer criaturas sanas física y espiritualmente. Criaturas que serán mañana hombres y mujeres valiosos para la sociedad toda.

Porque la verdadera maternidad comienza luego del parto. Ahi es cuando se exige dedicación, sacrificio, muchisimo amor, cuidados especiales a la criatura, y luego, la responsabilidad de que crezca saludable, cuidando la alimentación, la vestimenta, su educación formal, y los valores esenciales que se le transmiten en el hogar.

Los padres podemos y debemos hacer mucho por nuestros descendientes, pero nada sustituye ese vínculo tan íntimo, especial y único de la madre con la criatura que durante 9 meses tuvo alimentándola y creciendo dentro de su propio cuerpo.  ¡Maravilla conmovedora de la naturaleza!

¡A todas esas madres auténticas, el deseo de una celebración muy feliz en su más que merecido día!

enigma

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