Sunday, November 12, 2017

UNA SOCIEDAD EN DERROTA


Les confieso que cuando hoy leí esto en un suplemento del diario "El País" de Montevideo, me resultó una situación tan deplorable, un abajamiento o reducción tal de los valores morales de la familia, de la acción de los padres para formar a sus hijas e hijos adolescentes, de la ignorancia que campea, del cruzarse de brazos y dejar que las cosas ocurran, de irresponsabilidad después de todo, que me produjo una enorme desazón.

"Hoy, cuando se constata que la edad promedio de iniciación sexual continúa bajando progresivamente —55% de las mujeres y 67% de los varones se inician sexualmente entre los 15 y los 19 años, de acuerdo a la Encuesta Nacional de Comportamientos Reproductivos presentada este año— a las preguntas parentales que desde hace años existen se les suman nuevas, como la influencia de Internet y las redes sociales.

Para Correa han habido importantes cambios respecto al comienzo de la vida sexual de ellas: "En general, las chiquilinas tenían más asociado el comienzo de su vida sexual a una suerte de expectativa de proyecto de pareja, de noviazgo. Se era más exigente en cuanto a que su primera vez estuviera asociada a un vínculo afectivo. Hoy ya no es tan así", comenta el experto y agrega que en el presente las jóvenes están "más dispuestas a aceptar una relación sexual ocasional, como experiencia, sin la perspectiva de formar pareja".

Hay una explicación para eso: "Muchas veces, los temores y ansiedades vinculadas al sexo quizás se comprenden mejor en el contexto de una situación: si una chica tiene su primera relación al terminar una fiesta con un chico que conoció ahí, quizá algunos de los subterfugios morales quedan disminuidos frente a "Bueno, fue un momento. Fue el alcohol. Me dejé llevar". Para muchas chiquilinas — quizás de una manera no del todo honestas consigo mismas— es una forma de darle lugar a esa experiencia. Quizá en una relación más densa y profunda, se le hace más difícil de encarar, porque luego sigue frecuentando a esa persona".

Se constatan entonces tres realidades dolorosas: 

1) la edad promedio de iniciación sexual continúa bajando, y bien sabemos que por debajo de las edades citadas por la Encuesta Nacional de Comportamientos Reproductivos --de Uruguay-- muchas chicas a los 12 o 13 años ya quedan embarazadas.  Tampoco dicha encuesta dice nada sobre los embarazos precoces y la cantidad de madres solteras, un problema social tremendo, donde la chica es la primera víctima, y la segunda es la criatura que viene.

2) las jóvenes están más dispuestas a aceptar una relación sexual ocasional, como experiencia. Considero que no hay una disposición pensada como experiencia a adquirir. Simplemente el hecho ocurre porque no existe en las jóvenes una formación moral que les indique que no pueden --por respeto a sí mismas-- ser permisivas a tal extremo. Pero esta actitud, lleva a trivializar por completo algo tan importante como la relación sexual.  Lo afectivo --que es lo humano-- no está presente. Es una relación meramente genital y de entregar los cuerpos al placer sensual como simples animales.

3) El ejemplo dado admite que hay una fiesta, y que los jóvenes menores de edad, consumen alcohol. Algo que por ley está prohibido pero que los adultos, --padres incluidos-- permiten y toleran que haya en una fiesta de cumpleaños de adolescentes. Esto habla a las claras de una sociedad que ha perdido totalmente sus valores, de una sociedad en derrota, de una sociedad que no tiene una saludable capacidad de reacción.  Y la chica, que luego de tener su relación sexual, pretende explicar --supuestamente a los padres que "Bueno, fue un momento. Fue el alcohol. Me dejé llevar" no hace más que pretender justificar una situación por la que sabe que no debió pasar. 
Pero una auténtica relación afectivo-sexual no es"un momento", no se debe "al alcohol" (o podría ser a estar drogada), y no consiste en "dejarse llevar", ¿por qué cosa?, ¿por el deseo arrebatado del momento?, ¿por la curiosidad?, ¿por la incapacidad de pensar, de tener dignidad y de saber decir no?

Se confunde erotismo con amor.

Triste, muy triste este panorama que reitero, nos habla de una sociedad en derrota, y en decadencia. 

No es extraño que estos sean los síntomas constatables en una sociedad --la uruguaya-- que de haber tenido el legítimo orgullo de ser un país con la más alta tasa de alfabetización, ahora tenga chicos y chicas que no saben leer ni escribir correctamente, y así egresan de la enseñanza secundaria, si es que llegaron hasta allí.

Un país donde hay un tremendo retroceso en el proceso educativo formal, en una palabra, donde la educación --a todos los niveles-- está desde hace años ya, en crisis, y nada se ha hecho por revertir a fondo esta sitaución.

En resumen, lo del título: una sociedad en derrota.

Me pregunto si padres, jóvenes, y la ciudadania, seguirán permitiendo que esta situación empeore aún más.

Ah, quiero ser claro en esto: no es exclusividad de Uruguay, son muchas las sociedades que se enfrentan a esta problemática y a estos desafíos. Y la Internet especialmente, así como los videos de raperos o de cumbias --y sus letras-- no contribuyen en absoluto excepto, a vender los cuerpos como mercadería para uso de consumidores.

Y esto, también es corrupción.

enigma
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En YouTube ver COMPARTIENDO en VIDEO. "No confundir bondad con apatía"
https://www.youtube.com/watch?v=lKgdkUGfVP0

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