¡HAY DERECHO A INDIGNARSE!

Para estar bien claros desde el principio, comencemos por la definición de lo que es indignación: "Enojo, ira, enfado vehemente contra una persona o contra sus actos".

Es obvio que la indignación no tiene por qué circunscribirse a una persona, puede ser contra una situación, contra un gobierno, contra un estado de cosas que resulta intolerable. Es esencialmente un ¡basta ya!.

Y en el ejercicio legítimo de la libertad de opinión, de expresión y de reunión, hay derecho a indignarse, cuando las cosas llegan a un punto en que se tiene clara conciencia de que de no hacer nada, somos infames por colusión; o se nos está tomando por idiotas. En otras palabras, permitimos, toleramos, y no hacemos nada por expresar pública y claramente nuestra indignación y para reclamar un cambio.

Una convocatoria por las redes sociales, un llamado llegado a los celulares, son suficientes para que de pronto decenas o cientos de miles de personas se den cita en un lugar icónico,y allí expresen con pancartas, y pacíficamente, su indignación.

No hacerlo, en los hechos, es ser cómplice de lo que ocurre.

Es admitir lo inadmisible. Es esconder la cabeza como el avestruz, o tener tal cobardía que ya no se es digno de ser uno mismo.

Cuando campea corrupción, cuando gobernantes se apropian de dinero indebido, estafan, encubren lavados de dinero, pactan con criminales, dejan que fluya la inseguridad, se alían con gobiernos dictatoriales, y muchos etcéteras más,  hay que reafirmar los valores de decencia, dignidad, honestidad, sinceridad, en lo público como en lo privado.

Es hora de actuar. ¡Hay derecho a indignarse!

La historia reciente conoce ejemplos bien claros de cómo la gente en distintos países se ha organizado para manifestar su indignación.

Fueron los Indignados que se reunieron inicialmente en la Puerta del Sol en Madrid; la Generación de los 700 Euros que manifestó en la Plaza Síntagma en Atenas; el Movimiento 1-3-2 en Ciudad de México, o el Occupy Movement, en Nueva York y en Brasil, donde se decía "No necesitamos el Campeonato Mundial de Fútbol. Necesitamos dinero para Hospitales y Educación".

Surgidos primero espontáneamente, se les unieron miles de personas y llenaron las calles en sus diferentes naciones. Son movimientos, no estructuras fijas. La participación es libre. El objetivo, uno solo. Buscar modificar aquello que está mal y se denuncia.

Con respeto y pacíficamente, considero que en ciertas situaciones no sólo hay derecho a indignarse sino que es una obligación hacerlo, y  expresar públicamente esa indignación. Después de todo, es saludable para una sociedad y un país.

Joan Baez interpreta magistralmente la canción "Venceremos" (We shall Overcome) que es un himno internacional a la justa indignación.

enigma

Textos protegidos por derechos de autor
En Compartiendo en Video, ver: "Maldad y Equivocaciones" 
https://www.youtube.com/watch?v=JaTtjdi9YiM&feature=youtu.be