Afirmación de la Resurrección

Lo sé perfectamente, me consta, lo he verificado más de una vez: hay cristianos que dudan de la Resurrección de Emmanuel (Jesús).

Y lo que es mucho peor, he visto a Pastores usar el púlpito simplemente para arrojar sobre sus congregaciones, todas las dudas que les acucian, todas las fallas de su fé, en un domingo de Pascua.

No se trata de que la fé implique irracionalidad. La fé bien entendida no está reñida con la lógica ni con la ciencia.

Pero quienes en su ignorancia --no importa los títulos que ostenten-- o en su incapacidad para comprender y aceptar lo que está escrito en la Biblia, atropellan con la "razón" para demoler los milagros, no se dan cuenta que están dando la pobre imagen de quienes no han entendido nada. Y lo que es aún peor, de su total crisis de fé.

Si, Jesús fue resucitado por ángeles. Éstos hicieron su labor entre el anochecer del sábado y el amanecer del domingo.

Éstos mismos fueron los que estaban en la tumba ya vacía. Son los "dos varones con vestiduras resplandecientes" al decir del Evangelio según San Lucas, Cap.24 vs.4, o "un joven sentado al lado derecho,cubierto de una larga ropa blanca" de que habla San Marcos en el Cap.16. v. 5.

¿Quién que haya leído atentamente la Biblia puede sorprenderse de eso? La presencia de los ángeles está registrada desde el mismo Génesis.

Son ellos los anunciadores de actos portentosos, son ellos los que hacen engendrar a mujeres estériles, son ellos los que anuncian la destrucción de Sodoma y Gomorra, son ellos los que instruyen a Josué para derribar los muros de Jericó, son ellos los que anuncian a María que tendrá un hijo, y son ellos a quienes el mismo Jesús se refiere respecto a su segunda venida.

Cuando se entiende que hay mensajeros del orden divino que estuvieron muy activos en la Tierra, no tiene nada de sorprendente que en el Ser tan especial que era Jesús, hubiesen podido recuperar su vida, para ser nuevamente visto por los discípulos, comer con ellos, y finalmente despedirse.

La Resurrección es parte integral del mensaje de Jesús al mundo. Es un símbolo del triunfo del bien sobe el mal, de la justicia sobre la ignominia, de la verdad sobre la mentira, del poder divino sobre el remedo de poder de los humanos. Es el triunfo del espíritu sobre la materia, de lo trascendente sobre lo inmanente.

De ahí que en la Resurrección hallamos la clave hermenéutica para interpretar el sentido de nuestra existencia, y el por qué de la afirmacion de la vida eterna, de la vida más allá de esta que conocemos.

Una realidad esta última, que la ciencia misma ha ido comprobando.

Con auténtica alegría, con gozo profundo, con convicción total, podemos entonces celebrar.

¡¡FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN!!



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