Friday, January 21, 2011

A 9 meses de su partida: RECORDANDO A ALICIA

El 18 de Enero se cumplieron 9 meses.

Alicia era una mujer responsable. Practicaba lo que creía, y vivía lo que practicaba.

Era coherente en su forma de pensar, en su manera de actuar, en el encare de su trabajo, de las tareas y responsabilidades del hogar, como esposa, como madre y como abuela.

Amante de las plantas y de las flores, cuidaba sus macetas y su jardín con dedicación.

Maestra vocacional por excelencia, sus niños ya crecidos, casi hombres, la saludaban con afecto luego de años, si llegaban a encontrarla.

Dos matrimonios cuando tuvieron hijas aquí en Estados Unidos, las llamaron “Alicia”, en homenaje a ella, que había sido maestra de jardín de infantes de otros hijos.

Todos recuerdan a Alicia por su espíritu servicial, por su voluntarismo, por su sonrisa.

Alicia era además una mujer sencilla.

Nacida en un hogar de trabajadores, nunca ambicionó riquezas, pero sí quiso una vida digna, y la tuvo. Tampoco le gustaba la ostentación, las alhajas, el lujo.
Le chocaban las personas que buscaban el lucimiento.

Su estilo de vida era muy pragmático, no era una soñadora, no escribía poemas, era muy de vivir con los pies en la tierra. Sin embargo, era profunda en su pensamiento. Cuando reflexionaba o meditaba sobre algo, cuando se planteaba un problema, allí sugría su chispa de genialidad, y su intuición. Alicia era sumamente intuitiva.

Aún me rodean escritos de ella, y muchos efectos personales. Y por sobre todo me rodea una distribución y orden de las cosas de la casa, que apenas alteré a mi conveniencia.

Y cuando conduzco mi auto, sigo yendo por caminos y atajos que Alicia me enseñó.

Asi como tengo presente su consejo: siempre es conveniente aprenderse una ruta alternativa, si por determinada circunstancia no se puede tomar la que uno hace siempre.

Y lo otro, mirar edificios, o estaciones de gasolina, algo que le ayude a uno a ubicarse respecto de dónde está, especialmente de noche.

Ya han pasado nueve meses desde su desaparición física, pero no espiritual. Ella sigue estando presente en mi corazón y en mi vida diaria.

enigma


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